Domo y Lituche
Cosmovisión Mapuche
Mucho,
mucho tiempo atrás, en el principio, había un espíritu en el cielo llamado
Ngnechen.
Un
día, por su voluntad, decidió crear vida con ayuda de Kuyen, la Luna.
Con
la ayuda de Kuyen, creó Ngnechen una criatura.
La
llamó Lituche (Hombre del comienzo).
Cuando
Lituche hubo nacido en brazos de Ngnechen fue arrojado a la Tierra. Este , el
Hombredelcomienzo, Lituche, apartado de su creador, echó a llorar.
Al
oírle, Kuyen abrió un hueco en el cielo para ver qué pasaba a su hijo. Desde
entonces, la Luna
vela el sueño de los hombres.
Intrigado,
Ngnechen quiso -como aquella- saber la suerte de Lituche; abrió otro hueco
por dónde ver los días del primero de los hombres.
Nació
así Antú, el Sol, quien da luz y calor a los seres del mundo.
Pasó
el tiempo y el chiquito creció. Anduvo por los rincones de su entorno y sintió
gran soledad. En ese momento miró al cielo y preguntó al gran espíritu: ¿Por qué
he de estar solo?
Ngnechen
se compadeció de esa pena y eligió una estrella brillante y nueva para crear a
Domo, la mujer.
Una
vez terminada su obra, el Gran Espíritu la dejó caer con delicadeza sobre la Tierra. Domo
Ngnechen
quedó encantado con su obra y, a pedido de Kuyen, para que sus pies no se
dañaran, hizo crecer a su paso la hierba y las flores.
Pronto,
Domo y Lituche se miraron y comprendieron que juntos poblarían el vacío de
nuestra tierra.
Domo
le llevó a Lituche los sonidos de la naturaleza, ya que de su boca nacieron insectos, pájaros y
mariposas, las cuales trajeron a este mundo las melodías, los acordes, los colores
y las texturas que hoy conocemos.
Fuente: cuadernillo Observatorio Gemini
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